Antes de iniciar el embrollo de hacer las maletas pensé agradecer el saludo de Malle, Angeles, Ger y Jccortes. Hablé por telefono a Tepic y me dijeron que habÃan hecho circular un pequeño manifiesto que escribà la vez anterior en Puebla cuando anduve con Lenin recorriendo de madrugada la ciudad después del recital para tomar algunas fotografÃas. Reproduzco el manifiesto, porque me han dicho que Tepic es la ciudad de los poetas o al menos es el slogan pubicitario del presidente municipal.
El epazote no solo existe en las banquetas
-Manifiesto por el arte-
No respetamos ningún ISMO
No respetamos ningún género literario
No respetamos los lÃmites de los diversos géneros del arte, no hay tal lÃmite
No respetamos los derechos de Autor
No respetamos la autorÃa ni la inalienabilidad de la obra artÃstica
No respetamos a los individuos como autores con derecho a propiedad privada intelectual o artÃstica,
no hay tal derecho
No aceptamos la obra de arte intocable, ninguna obra es intocable
No condenamos las drogas, ni el alcohol, ni las alucinaciones.
Respetamos las decisiones de los individuos para suicidarse y de anunciarlo como les venga en gana
Respetamos la vida y la muerte
Respetamos el humanismo
Respetamos el derecho a la vida y a la muerte, son inalienables
Respetamos a los sujetos virtuales, imaginarios, invisibles, anónimos, extraterrestres
Respetamos todo exceso en pos del arte
Toda expresión artÃstica vive por sà misma, tiene vida
Los limites de la creatividad son desconocidos, difusos, vagos, intensionales, borrosos,
maravillosos, catatónicos, deliciosos, explosivos
Toda obra de arte se modifica con el tiempo
La PoesÃa basura (o light) es arte efÃmero, existe un arte efÃmero
La PoesÃa Pobre no tiene autores, solo poemas, se gesta, pero no
únicamente, en el ciberespacio, en las lecturas de PoesÃa callejera,
en las aulas de FilosofÃa y Letras, en los Bares, en los cafés
culturales, en la radio, el periódico, las publicaciones
artÃsticas y literarias.
Liberémoslo todo, dejémoslo todo, trepanemos nuestras cabezas y re-escribámoslo todo nuevamente.
Generemos una nueva forma de arte, no solo literaria
El epazote no sólo existe en las banquetas.
Edgar Altamirano,
Casa del Escritor, Puebla, Pue.
10 de octubre de 2004.