Este es el campo de fútbol que se encuentra enfrente de mi casa; uno de mis placeres añejos ha sido siempre levantarme con el sol y mirar el horizonte desde un campo de fútbol donde corro eufórico detrás de una pelota. Hacia semanas y meses que no estaba de nuevo aquí, en parte por el nuevo horario de trabajo que me asignaron en la Universidad, esto influyó negativamente en mi ánimo de levantarme con el sol solamente para ir a la cancha, lo hago aún, pero es pensando en las labores cotidianas, en mis alumnos que estarán allí puntualmente aunque tarde, esperando clases. Hoy he vuelto. Y decidí tomar esta fotografía con una cámara vieja, sin flash, así que debí esperar un poco a que surgiera la luz del horizonte. A menudo, cuando me canso, suelo tirarme boca arriba enmedio del campo de futbol, es como una cábala para mí, que me devuelve al mundo. Sin embargo no puedo decir que soy un atleta ni siquiera un buen deportista. Soy un obsesionado del trabajo y de la informatica y de la Poesia y de muchas otras cosas que consumen mi tiempo diariamente. Llego siempre a medianoche cargado de pendientes y con el tiempo encima para ir a la cama; el descanso es lo mejor para el trabajo del día siguiente. El sueño es muy importante y no es bueno estar durante el día medio dormido si lo que deseas es rendir al máximo y con una muy buena concentración en las tareas que te depara el día. Pero además, hoy era un día importante porque volví al campo y porque todo se me dió para volver.
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