Tenemos una soga que cuelga en el centro de la sala
mi esposa enseña a un sobrino para que aprenda matemáticas
el niño nunca estudió matemáticas
y mi mujer enseña a bofetadas
luego cuelga al sobrino de la soga
"hasta que repitas todas las tablas de multiplicar y dividir"
el niño grita y llora, pero repite las tablas
no lo olvidará nunca
mi esposa guarda un pececito en la pecera
¡que nadie le ofrezca de comer porque se caga!
¡Pero esposa, el pececito morirá!
A mi mujer se le desprende un minúsculo
pedacito de uno de sus dientes postizos,
está desesperada, toda la casa de cabeza
¡debo ir al médico! ¡tengo que ir al dietista!
y va al espejo cada cinco minutos;
el extraterrestre toca el timbre de la puerta
viene a tomar un café con nosotros
se quedará a comer, su conversación es interesante
habla mucho de la vida en la tierra
entiende poco de nuestras costumbres
se divierte en la calle, la gente lo admira;
mi mujer cambia de color cuando él aparece
su rostro verde se torna azulado,
su conversación aparece de colores
las palabras que surgen de sus labios
son como un arcoiris de palabras.
jueves, julio 30, 2009
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