lunes, mayo 20, 2013

El demonio de los andes

Cada vez que invento un Poema
necesito una o dos cervezas
así conocí a la mujer oscura
entrando al Bar
se acomodó junto a mí,
tú eres el viejo infrarrealista, dijo
yo soy un poeta Ciborg, respondí
poseo un pequeño chip
conectado a mi cerebro
¿el chip concibe tus poemas? -preguntó
y así continuamos la conversación
el Bar aparecía en penumbras
con parroquianos enmohecidos
pedimos una botella de pisco
el demonio de los andes
y continuamos bebiendo;
soy terapeuta en un laboratorio
para desquiciados mentales, dijo
y me pasó un brazo
por encima de los hombros
nos abrazamos
y lloramos
entonces emergieron
sus ocho patas de aluminio
negras y brillantes
y con pasos de tarántula
me abandonó en el Bar.

Share/Bookmark

No hay comentarios.: