Mi auto se descompuso.
Es la mil ciento una vez
que sucede.
El mecánico es muy inteligente.
Siempre encuentra algo descompuesto
diferente al desperfecto.
Y después de la reparación,
se descompone de otra cosa.
Hoy lo fui a ver. La llave de
encendido se atora.
"Es muy difícil arrancar el coche,
me pongo muy nervioso".
Déjeme el auto, dice.
Se lo dejo.
Por la tarde voy y encuentro mi
auto desarmado.
"Encontré la dirección dañada y
he comprado piezas de repuesto,
aqui están", dice, y señala dos
piezas de acero que no entiendo.
En cuanto al switch de encendido
llamaré a mi hermano, él administra
una cerrajeria muy buena, usted ya
lo conoce.
Está bien, digo.
¿Cuándo vengo por el auto?
Dése una vuelta en dos días.
OK.
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario