paramos en el bar de Jennifer y Andrea
a tomar pisco, y un marica vestido de mujer
me dirigió un saludo,
me gustaría abrazarte,
-dijo
pero me dirigí a la barra
para charlar un poco con Jennifer.
Andrea me sirvió un pisco sour
y hablamos de poetas italianos
a pesar de todo, prefiero César Pavese,
-le dije
entonces ofrecí a Jennifer
unos dulces de tamarindo picante,
había traído un mezcal con gusanos
pero nos lo habíamos bebido
no te preocupes, -respondió,
ya comprarás otro por aquí;
el bar de la calle Arribau
se llena de maricas
algunos vestidos de mujer
todos muy buenas gentes
charlando, saludando,
el camarero es muy agradable
un hombre encantador
lo juro.
![Share/Bookmark](http://static.addtoany.com/buttons/share_save_171_16.png)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario