martes, mayo 19, 2009

Bebidas nocturnas

Hoy fue día de la Internet, llego a casa
y recibo el primer insulto de mi esposa.
Obama encubre los abusos de sus militares,
falleció el poeta uruguayo Mario Benedetti
y me llaman de la radio:
"¿Qué libro recuerdas de Mario Benedetti?"
-preguntan. "Ninguno", contesto.
Mi mujer brama su segundo insulto del día.
Después de quince años inédito, mi editor
consigue la publicación de un libro,
cincuenta ejemplares, pegado a mano,
"las Ediciones Clandestino son poderosas,
es lo mejor que podemos obtener" -me dijo;
no creo que se venda, es más, no me importa.
El libro no llegará a las librerías,
es absolutamente clandestino. Pasará de mano
en mano. Saldré a la calle. Llueve a cántaros.
Mi mujer me grita. No hago caso. Enciendo el
auto. Busco un lugar de bebidas nocturnas.
Observo a los parroquianos. No son humanos,
son caricaturas, avatares cómicos fugados
de algún mundo virtual. Pido una cerveza
en lata. Miro la noche. Los autos pasan.
Salgo a la acera. Orino sobre el pavimento.
Tengo un hoyo en la panza.
Share/Bookmark

No hay comentarios.: