miércoles, junio 30, 2010

El hombrecito verde

Llegué a la casa con el rostro en verde
mi mujer exclamó:
"Dios mío, te estás poniendo verde"
"Es que parece que voy a morir" -le dije,
"Pienso retirarme de la vida pública,
no sería una buena idea seguir así" -contesté.

Mi mujer se quedó sin habla,
durante más de veinte años he guiado su automóvil,
la he llevado a todas partes,
no se ve sin mí,
no sería una buena idea que un cadáver manejara.

Pero pienso vivir en los mundos virtuales,
seré una caricatura verde, con una casa enorme
al lado del mar, arena limpia y espacios grandes
para leer libros, escuchar música
y sentarme rodeado de chicas, bebiendo vino
y comiendo quesos azules.

A mi mujer no le pareció tan mala idea,
quizás podría conseguirse un chofer más guapo,
con el dinero de los seguros podría pagárselo,
saldrían de vacaciones cada verano,
sí, no es una mala idea, todos felices.

"¿No podrías ponerte todo verde de una buena vez?"
-me dijo.
Share/Bookmark

1 comentario:

pedro granados dijo...

Eres el mejor poeta mexicano actual, no me cabe duda,
Pedro